ERCOLINI REEMPLAZA A CANICOBA CORRAL Y QUEDA A CARGO DE LA CAUSA AMIA
El juez federal salió sorteado para reemplazar al magistrado que renunció para jubilarse y el próximo 29 de julio cumplirá 75 años.
Este miércoles, Julian Ercolini salió sorteado para reemplazar a Rodolfo Canicoba Corral, quien se encuentra próximo a jubilarse, y quedará a cargo de varias causas, entre ellas, la del atentado a la AMIA. Sebastián Casanello fue sorteado también, para subrogar el Juzgado 12, vacante desde que Sergio Torres fue nombrado en la Suprema Corte.
Tanto Ercolini como Casanello, tienen la posibilidad de excusarse en los próximos días. Si esto sucediera, se repetirá el sorteo. Pero fuente judiciales adelantaron que ambos aceptarían subrogar en los juzgados.
Ambos jueces subrogarán el próximo 29 de julio. Casualmente, el día en el que Canicoba Corral cumple 75 años, la edad prevista por la Constitución Nacional para la jubilación de jueces.
De modo que, Ercolini, quedará a cargo de las investigaciones del atentado a la AMIA y la renegociación de los peajes durante la presidencia de Mauricio Macri, por la que Canicoba imputó y embargó -el lunes- a dos funcionarios y citó a indagatoria a Dujovne y Dietrich.
Actualmente es el juez titular del Juzgado Federal 10, detrás de las causas por fraude de Vicentín al Banco Nación y Oil Combustibles, que se encuentra en etapa de juicio oral.
En efecto, el juez federal Julián Ercolini reemplazará a Canicoba Corral, interviniendo en las causas del Juzgado Federal 6 -del que era titular desde 1994 cuando fue creado-.
Previo al sorteo realizado por la Cámara Federal porteña, tres jueces del fuero federal porteño se excusaron: María Servini, quien suele hacerlo por ser jueza con competencia electoral; Marcelo Martínez de Giorgi, quien subroga por sorteo el juzgado vacante del fallecido Claudio Bonadío; Luis Rodríguez, por razones personales; y Daniel Rafecas, porque espera definiciones sobre su candidatura a la Procuración General de Nación.
El sorteo se realizó con bolillero manual en el segundo piso de los tribunales de Retiro y esta vez fue casi sin presencia de público ante el aislamiento social preventivo y obligatorio por el coronavirus.
