GUZMÁN HABLÓ DE LAS NEGOCIACIONES CON EL FONDO MONETARIO

Fue cauto y adelantó que, probablemente, a principios del año próximo haya un acuerdo logrado. Según su óptica, la negociación será igual de dura que con los acreedores.

El ministro de Economía, Martín Guzmán, aseguró que, si bien el acuerdo con los bonistas fue importante, forma parte de “un conjunto de problemas estructurales” que Argentina debe resolver.

“Hemos dado un paso importante, hay que mantener la cautela. Es simplemente un paso importante, Argentina tiene un conjunto de problemas estructurales. Sabíamos previo al 10 de diciembre que este era un tema central en el que teníamos que avanzar mientras íbamos avanzando en otro conjunto de temas centrales”, analizó Guzmán esta mañana en Radio Metro.

“Se alcanzó este resultado, no se terminó la reestructuración. Esto está abierto hasta el 24 de agosto pero obviamente va a dar cuando esto termine un horizonte más despejado para las políticas públicas”, advirtió.

Luego habló de “otro paso que debemos dar”, las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional: “Son aproximadamente USD 45.000 millones de dólares que tomó el Gobierno previo bajo la expectativa de que esto iba a generar un shock de confianza

“Entonces esto iba a bajar el costo al que la Argentina se endeudaba en los mercados financieros internacionales. Iba a poder tomar prestado a tasas más bajas y con eso pagarle al Fondo. Eso no pasó”, explicó Guzmán sobre el “shock de confianza”.

“Ahora tenemos una montaña de vencimientos entre septiembre del 2021 y 2024 a los que no podemos hacer frente en las condiciones en las que está Argentina. Fue manifestado de forma explícita como un apoyo al Gobierno anterior, apoyar a que pueda ganar las elecciones. Bueno, finalmente la economía se desplomó como todos sabemos y ahora buscamos resolver el problema”, se extendió Guzmán al respecto.

El titular del Palacio de Hacienda no descarta que el Fondo pueda poner condiciones como un ajuste fiscal, una flexibilización laboral o una reforma previsional. En ese sentido, afirmó que no aceptará “nada que vaya en contra del desarrollo de la Argentina”.

“Seguramente habrá intereses (del Fondo) que se van a ver manifestados en las negociaciones. Pueden empezar a aparecer distintos tipos de pedidos. Uno nunca tiene que descartar que ese tipo de pedidos puedan empezar a manifestarse”, explicó el funcionario.

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