“EL PRESIDENTE DIJO QUE IBA A EMPEZAR POR LOS ÚLTIMOS Y LO HA HECHO”
Lo afirmó esta mañana el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, que repasó las medidas implementadas por el Gobierno durante la pandemia y adelantó que, en caso de una segunda ola de contagios que paralice actividades, se volverán a ejecutar “políticas sociales excepcionales”.
El ministro dijo que este año el objetivo es “crear 300.000 puestos de trabajo, urbanizar 400 barrios populares y crear 800 jardines de infantes”.
El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, afirmó hoy que “el presidente Alberto Fernández dijo que iba a empezar por los últimos y realmente lo ha hecho”, al repasar las medidas implementadas por el Gobierno durante 2020, en el marco de la pandemia de coronavirus, y las proyectadas para este 2021.
Entrevistado en Radio La Red, Arroyo ratificó que, en caso de una segunda ola de casos de coronavirus y “si se vuelven a paralizar algunas actividades, vamos a generar políticas sociales excepcionales”.
En esa línea, el funcionario del Gobierno nacional explicó que, para 2021, las políticas sociales estarán orientadas a “crear 300.000 puestos de trabajo, urbanizar 400 barrios populares y crear 800 jardines de infantes, ya que la pobreza más grande está en los más chicos, y sostener la asistencia alimentaria”. Sobre esto último, Arroyo recordó que la asistencia alimentaria alcanza a 11 millones de personas.
El ministro reafirmó que “está el compromiso, como en 2020, de atender la situación social”, cualquiera sea la situación. Previamente, destacó que, actualmente, “en los barrios hay un poco más de changas” y que, antes de las fiestas, bajaba semana a semana la gente que asistía a los comedores por ese motivo.
Por otro lado, evaluó que en los barrios populares “los dos problemas mayores son el costo de los alimentos y el endeudamiento de las familias” y destacó el sistema de crédito no bancario para maquinaria y herramientas a tasa de 3% anual que lanzó su cartera.
Al mismo tiempo, repasó las políticas para los barrios más humildes, con el objetivo de bajar el precio de la leche y el pan por medio de cooperativas, aunque reconoció que “hay mucho más para hacer”.
En cuanto a los principales problemas a resolver hacia adelante, Arroyo indicó que hay un millón de jóvenes que no estudian ni trabajan, y subrayó que la beca de 8.500 pesos para proyectos productivos es una de las herramientas para resolverlos.
