Lucas Ghi, intendente de Morón, habló este martes con CNN Radio, en relación al llamado a la rebelión fiscal: “Son declaraciones muy graves”.
“Llamar a que la población no pague impuestos pone en jaque los cimientos de la convivencia democrática”, remarcó Ghi. Y recordó que la ley impositiva se votó con apoyo de la oposición. Y descartó que dicho llamado ocurra porque “hay un sentido de racionalidad” en la comunidad.
E informó: “De las 300.000 partidas del impuesto inmobiliario rural, son 2000 las que aumentaron más que la inflación. El resto de las 300.000 partidas van a tener aumentos por debajo de la inflación”.
Por otro lado, Ghi mostró su preocupación en la caída de los gastos en obra pública y pidió que se terminen las obras que están en curso. “Tengo 600 viviendas a un mes de empezar a entregar, entregas viviendas no joroba a un gobierno”, agregó.
Además, advirtió: “Hay riesgo que las suspensiones de empleados se conviertan en despidos”. Y llamó a pensar creativamente en cómo llevar adelante otros proyectos relacionados con la materia.
“Este programa ya fue aplicado en nuestro país y los resultados son conocidos. Hay una convicción muy fuerte de lograr el equilibrio fiscal, pero tengo diferencias en el cómo”, determinó el intendente de Morón.
